Te sientes con suerte?

"You've got to ask yourself one question: 'Do I feel lucky?' Well, do ya punk?"

Revisando un blog por internet me encontre con una critica sobre los juegos olimpicos con 10 puntos. Bien estructurado blah blah blah:
http://sociologiac.net/2008/08/25/10-razones-para-oponerse-a-los-juegos-olimpicos/

Peeero el punto que mas me llamo la atencion fue el numero 9:

9. Espectador

Observar deportes olímpicos integra a los espectadores (especialmente hombres) dentro del dominante sistema de valores de competencia y esfuerzo para lograr el éxito. Con el pretexto de disfrutar el entretenimiento y apoyar a su equipo favorito o atleta, los espectadores del deporte son inculcados bajo la hipótesis de que la vida es una competición, que las normas son justas, que la mayoría de las recompensas van a los ganadores, y que los perdedores tienen que culparse a sí mismos. Estas ideas son convenientes para mantener a los trabajadores en la rutina. Es debido a las similitudes entre el deporte competitivo y los negocios que metáforas deportivas —igualdad de condiciones, puntuación— son tan frecuentes fuera de las arenas deportivas.

Que quiere decir con esto?

Que en la vida nos ensenian a que segun esto todos tenemos las mismas oportunidades y que todos pueden cumplir su suenio?

AH, neta?

Lo cual me vino a la mente el siguiente cabildeo:

Como sabes que fuiste el mejor esperma que fecundo al mejor ovulo?

Piensalo bien, o sea, que te hace creer que fuiste el mejor destilado de la naturaleza. Se sabe cientificamente que hay no todos los espermas y ovulos se hacen igual. Tal vez el mejor de los mejores se fue por el tubo equivocado y tu de casualidad te encontraste en el camino correcto para fecundar.

Suerte?

Como sabes si tus papas le hecharon ganas y se alimentaron sanamente?

...Entonces...

• El hecho de que las reglas se apliquen igual para todos es mentira.
• Todos somos diferentes.
• Los resultados de tus esfuerzos pueden llegar a cambiar de un momento para otro porque NO tienes control sobre tu vida.
  

Tampoco es pretexto para que te pongas como loco. Solo date cuenta que a veces le damos una importancia exagerada a las cosas.

Ni hay cosas buenas ni hay cosas malas. Las cosas son. Depende de nosotros que valor le pongamos.

Te quiero!